Saltar la navegación

2.2. Microorganismos y sus características

Objetivo

OA5 Comprender las principales características de microorganismos como bacterias, hongos y protozoos.

Conocimiento previo

Observa la siguiente imagen y reflexiona las preguntas a continuación. 

Preguntas

1) ¿Qué son esas manchas que se observan en el pan después de 20 días?

2) ¿Las manchas que se observan en el pan de 20 días son seres vivos? Fundamenta.

Diversidad de microorganismos

Hace billones de años, la Tierra tenía condiciones muy extremas: altas temperaturas, falta de oxígeno y exceso de dióxido de carbono y metano. En esta atmósfera, surgieron los primeros microorganismos, algunos de ellos comenzaron a producir y liberar oxígeno, cambiando radicalmente las condiciones del planeta. La acción de estos primeros habitantes redujo la temperatura y elevó la concentración de oxígeno en la atmósfera, lo que hizo posible la vida para otros organismos con características diferentes. Luego del cambio en la atmósfera terrestre, los microorganismos se diversificaron, lo cual les permitió colonizar diferentes ecosistemas, incluso los más extremos. En el mar, en los suelos e incluso en nuestro cuerpo podemos encontrar millones de microorganismos.



Los microorganismos pueden ser unicelulares o pluricelulares, procariontes o eucariontes. Algunos ejemplos de microorganismos son los que se señalan en el siguiente esquema.

En la naturaleza existe una gran diversidad de microorganismos. En esta lección estudiaremos las características de bacterias, hongos y protozoos.

Bacterias

Las bacterias viven en ambientes diversos, incluso en hábitats de condiciones extremas para nosotros, como aguas con elevada concentración de sales o ambientes carentes de oxígeno. Estos microorganismos pueden vivir aislados o agrupados formando colonias. Gracias a esto último, es posible reconocer a simple vista la presencia de estos y otros microorganismos en un medio de cultivo, mezcla sólida o líquida que contiene las sustancias necesarias para su crecimiento.

Al igual que el resto de los seres vivos, las bacterias requieren de una fuente de energía para vivir. Algunas de ellas son autótrofas, es decir, elaboran sus propios nutrientes, como las cianobacterias que realizan fotosíntesis; otras son heterótrofas, pues incorporan los nutrientes del medio, como las bacterias que descomponen restos de animales y vegetales muertos. Además, se reproducen, principalmente, por bipartición o fisión binaria , proceso en el que una bacteria progenitora se divide y genera dos células hijas idénticas.

Reproducción de bacterias por bipartición o fisión binaria. 


Hongos

Los hongos son organismos eucariontes, pertenecientes al reino Fungi, que se encuentran extensamente distribuidos en el medio ambiente. Además, están muy cerca de nosotros, por ejemplo, en una fruta o en un pan descompuesto. Para evidenciar esto, y algunas de las condiciones que necesitan para vivir.

Los hongos, al igual que ciertas bacterias, obtienen energía de la descomposición de materia orgánica, como alimentos y restos de animales o de plantas. Por lo tanto, presentan nutrición heterótrofa. Existen hongos microscópicos, como las levaduras. Estos organismos unicelulares se reproducen por gemación, proceso en el cual la célula madre produce una pequeña yema que se desprende y crece hasta originar una nueva levadura.

Reproducción por gemación


Los hongos pluricelulares están formados por largos filamentos de células llamados hifas. El conjunto de hifas forma una estructura llamada micelio. Algunos de estos hongos pluricelulares, los denominados mohos, se reproducen mediante esporulación. Este proceso consiste en múltiples divisiones del núcleo de una célula, de las que se generan unas células llamadas esporas, que son liberadas al medio y que, en condiciones ambientales favorables, originan un nuevo organismo.

Reproducción por esporulación 


También hay hongos macroscópicos, cuyas estructuras se pueden identificar a simple vista, por ejemplo, las setas, algunas de las cuales, como los champiñones, tienen gran importancia en la industria gastronómica.

Protozoos

Los protozoos se consideran animales unicelulares primitivos,  son heterótrofos (deben consumir materia orgánica) y están dotados de movimiento voluntario. Existe actualmente debate científico respecto a su correcta clasificación en las distintas ramas del árbol de la vida.

La mayoría de los protozoos pueden ser vistos con un microscopio, ya que su tamaño oscila entre 10 y 200 micrómetros, y se conocen alrededor de 300.000 especies de ellos, a lo largo de los diversos peldaños de la cadena alimentaria microscópica: herbívoros, descomponedores, depredadores y parásitos. Muchos de ellos son capaces de infectar y enfermar al ser humano.

Protozoo alimentándose 


Los protozoos pueden reproducirse sexual y asexualmente, dependiendo de las condiciones medioambientales y de sus ciclos de vida. Suelen hacerlo abundantemente, lo cual es clave para su éxito biológico y evolutivo. Sus principales métodos de reproducción son por bipartición (fisión binaria), esporulación y gemación. 

Tabla comparativa Bacterias, hongos y protozoos.

A continuación se presenta una tabla comparativa entre distintos microorganismos.